A pocos días de que se armen las mesas familiares, los regalos y la llegada de Papa Noel, es importante destacar que a pesar de que para nosotros es una tradición ya establecida, hay muchos países que no tienen el hábito de festejar la Navidad.
Esto se debe a que en algunas regiones, la fecha no tiene reconocimiento estatal o no existe como evento social. En otras, predomina una religión distinta al cristianismo y en algunas, los Estados restringen las manifestaciones religiosas en el espacio público. No pasa en pocos lugares, sino que hay muchos países en distintos continentes que no festejan la Navidad.
Medio Oriente y Asia Central: lejos del calendario oficial
En gran parte de Medio Oriente y Asia Central, la Navidad no es una festividad reconocida por el Estado. Arabia Saudita, Irán, Yemen, Afganistán, Qatar, Kuwait y Omán, son países que no incluyen el 25 de diciembre como feriado nacional.

Allí, el islam es la religión predominante y estructura gran parte de la vida social y legal. Por ende, la fiesta que nosotros tenemos el 25 de diciembre, puede celebrarse en forma privada dentro de comunidades extranjeras, embajadas o ámbitos diplomáticos, pero sin visibilidad pública ni reconocimiento oficial.
África: festejos no oficiales
En el norte del continente y en otras zonas, la Navidad no forma parte del calendario nacional. Por ejemplo, en Argelia, Libia, Marruecos, Mauritania y Somalia.
Las festividades oficiales están basadas en cuestiones religiosas propias, principalmente islámicas. La Navidad no es feriado, no tiene celebración nacional y tampoco tiene un peso cultural importante.
Asia oriental y el sudeste asiático: existe la Navidad pero no es feriado
En Asia Oriental y el sudeste asiático, se sabe de la celebración, pero no es oficial. China, Japón, Tailandia, Vietnam, Laos y Camboya, atraviesan el 25 de diciembre como un día laborable.

En esos países, la Navidad tiene un perfil más comercial o social: decoraciones, promociones, cenas o encuentros, pero no un carácter religioso.
Corea del Norte: el caso más extremo
En este país, el Estado desalienta cualquier manifestación religiosa y la Navidad no se festeja ni pública ni privadamente. El día no tiene ningún significado festivo y no forma parte de la vida social de las personas.
Además, la religión está muy controlada y cualquier celebración ajena al culto oficial del régimen es reprimida, lo que convierte a Corea del Norte en uno de los pocos países donde la Navidad está realmente ausente.































