La infección bacteriana más frecuente en humanos tiene su origen en el Helicobacter pylori, una bacteria considerada “silenciosa” y que afecta a una impactante cantidad de personas, aunque no lo sepan. Su presencia puede derivar en gastritis crónica y cáncer gástrico.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ya la clasificó como un carcinógeno tipo 1 y entidades especializadas de nuestro país trabajar para concientizar sobre los riesgos que conlleva.
La Sociedad Argentina de Gastroenterología (SAGE), la Federación Argentina de Endoscopía (FAGE), la Federación Argentina de Endoscopía Digestiva (FAAED) y el Club Argentino del Estómago y Duodeno (CADED) sostienen que es fundamental diagnosticar y tratar esta infección para reducir sus daños.
Las características del Helicobacter pylori
El Helicobacter pylori reside en el estómago. En Argentina afecta a alrededor del 40 al 50% de la población: muchas personas están infectadas sin saberlo. Esta bacteria es la principal causa de gastritis crónica, úlceras gastroduodenales y cáncer gástrico.
El hallazgo del Helicobacter pylori no solo transformó el campo de la medicina digestiva sino que le valió un Premio Nobel a los doctores Barry Marshall y Robin Warren.
Aunque no se conoce con exactitud su mecanismo de transmisión, se asocia a condiciones higiénico-sanitarias deficientes, además que suele haber alta transmisión intrafamiliar.
Asimismo señalan que el diagnóstico es sencillo y accesible: mediante estudios no invasivos como el test del aliento, antígenos en materia fecal o a través de biopsias gástricas obtenidas durante una endoscopía digestiva alta.
La situación en Argentina y el mundo
En países con alta incidencia de esta enfermedad, como Japón y Corea del Sur, existen políticas de búsqueda activa y tratamiento masivo. En Europa, asimismo, se están impulsando estudios poblacionales para evaluar el impacto de la erradicación del Helicobacter pylori en la prevención del cáncer gástrico.
En Argentina, todavía no existe una política pública específica para la detección y tratamiento de esta bacteria. Según señalan los especialistas, la falta de una estrategia nacional se debe a la “suposición de que el cáncer gástrico es poco frecuente”.
“Los argentinos presentan un riesgo intermedio, y debemos considerar además que en áreas como el AMBA conviven comunidades con mayor predisposición (descendientes de asiáticos, latinoamericanos andinos y europeos del este). Un aspecto relevante es que el cáncer gástrico afecta principalmente a personas mayores, y debido al envejecimiento poblacional, se proyecta un aumento de casos en los próximos años”, señalan los expertos, según consigna Infobae.
Cómo se trata el Helicobacter pylori
El Registro Argentino de Helicobacter pylori, conformado por más de 30 investigadores de al menos 8 provincias, demostró que los esquemas actuales logran tasas de erradicación superiores al 90%”.
Los tratamientos combinan 2 o 3 antibióticos desde 10 a 14 días (dependiendo del tratamiento elegido por el profesional) y pueden incluir bismuto. Las terapias con bismuto son muy efectivas y al requerir solo 2 antibióticos, podrían afectar menos la microbiota intestinal.
Por otra parte, aclaran: “Si bien desde la comunidad médica promovemos el uso racional de antibióticos por su impacto en la microbiota y la resistencia bacteriana, es importante remarcar que Helicobacter pylori no forma parte de la microbiota normal del estómago, sino que la altera y favorece procesos inflamatorios y precancerosos".