Cómo hacer un budín de limón súper húmedo: el truco con aceite para que no se abra el bizcocho en el horno

Suave, esponjoso y bien húmedo: este budín de limón con aceite es la receta perfecta para la merienda o el desayuno.

Cómo hacer un budín de limón súper húmedo: el truco con aceite para que no se abra el bizcocho en el horno
Budín de limón casero súper liviano y sin harina

El budín de limón es un clásico de la pastelería casera argentina. Siempre está presente en los desayunos de domingo, en las meriendas con mate o en la vianda de los chicos. Pero esta versión, compartida en TikTok por el usuario Lautanasia, se volvió viral gracias a un detalle clave: queda increíblemente húmedo y con un sabor intenso a limón.

El secreto está en el uso del aceite en lugar de manteca y en la combinación con yogur natural, lo que le da una textura esponjosa y ligera. Además, el jugo de limón con azúcar impalpable potencia ese gustito cítrico que lo hace irresistible.

Así queda el budín por dentro.
Así queda el budín por dentro.

Qué ingredientes se necesitan para hacer el budín de limón con aceite

  • 220 g de harina leudante
  • 150 g de azúcar
  • 100 g de yogur natural
  • 2 huevos
  • 80 g de aceite
  • Ralladura de 2 limones
  • Jugo de 2 limones
  • 50 g de azúcar impalpable
Este budín queda muy húmedo.
Este budín queda muy húmedo.

Paso a paso, cómo preparar el budín de limón con aceite

  1. En un bowl, colocar el azúcar y la ralladura de limón. Perfumar el azúcar frotándolos con las manos.
  2. Agregar los huevos y batir hasta que la mezcla se vuelva espumosa.
  3. Incorporar el aceite y seguir batiendo.
  4. Sumar el yogur y la harina tamizada, mezclando suavemente hasta integrar.
  5. Volcar la preparación en una budinera forrada con papel manteca.
  6. Hacer un corte en la superficie del budín y, si se desea, añadir unas gotas de aceite en ese tajo.
  7. Llevar al horno precalentado a 170° durante 30 a 40 minutos.
  8. Mientras tanto, preparar un glaseado mezclando jugo de limón, azúcar impalpable y un poco de agua tibia.
  9. Al retirar el budín del horno, pincharlo con un palillo y bañar con el glaseado.
  10. Terminar con un poco más de ralladura de limón por encima.

Este budín no solo es fácil de hacer, sino que también podés freezarlo en rodajas y tener siempre algo dulce y casero a mano. Perfecto para los que buscan un sabor fresco y una textura húmeda que no falla en ningún mate.