En una muestra de apoyo inédito, el Gobierno de los Estados Unidos vendió dólares en el mercado local a través de un banco privado como parte del paquete de respaldo impulsado por la administración de Donald Trump.
El anuncio fue realizado por el secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Scott Bessent, quien además informó sobre la conclusión de las negociaciones que durante toda la semana mantuvo con el equipo económico en Washington.
“Argentina enfrenta un momento de grave iliquidez. La comunidad internacional, incluyendo el FMI, apoya unánimemente a Argentina y su prudente estrategia fiscal, pero solo Estados Unidos puede actuar con rapidez. Y actuaremos. Para tal efecto, hoy compramos directamente pesos argentinos”, indicó Bessent.
La operación se realizó a través del Banco Santander y llevó la cotización del dólar mayorista a $ 1.420. La jornada había empezado con la postura de intervención oficial en $ 1.470 para la cotización mayorista, y de $ 1.490 para la minorista.
Llamativamente, a poco de iniciarse la ronda los operadores comenzar a observar posturas privadas y al final del día el precio de la divisa desbarrancó a $ 1.420, $ 10 por debajo del cierre previo.
El oficial también se reacomodó y cayó a $ 1.450.
El cuadro de situación da para pensar en alguna “picardía” del equipo económico para “aleccionar” a quienes querían seguir apostando contra el peso.
“El Tesoro de los Estados Unidos concluyó cuatro días de intensas reuniones con el ministro Luis Caputo y su equipo en Washington D. C. Conversamos sobre los sólidos fundamentos económicos de Argentina, incluyendo los cambios estructurales ya en marcha que generarán importantes exportaciones en dólares y reservas de divisas”, sostuvo Bessent en una comunicación en redes sociales.
El funcionario precisó que finalizó “un acuerdo de swap de divisas por U$S 20.000 millones con el Banco Central de Argentina” y reiteró que “el Tesoro de Estados Unidos está preparado, de inmediato, para tomar las medidas excepcionales que sean necesarias para estabilizar los mercados”.
“Le recalqué al ministro Caputo que el liderazgo económico del presidente, Donald Trump está comprometido a fortalecer a nuestros aliados que dan la bienvenida al comercio justo y la inversión estadounidense”, añadió el funcionario.
Bessent sostuvo que sigue “escuchando a líderes empresariales estadounidenses que, gracias al liderazgo del presidente Milei, están deseosos de estrechar los vínculos entre las economías estadounidense y argentina”.
“La administración Trump apoya firmemente a los aliados de Estados Unidos, y con ese fin también conversamos sobre los incentivos a la inversión en Argentina y las herramientas estadounidenses para impulsar con fuerza la inversión en nuestros socios estratégicos”, reiteró el secretario del Tesoro.
Por otro lado, Bessent reveló que Caputo “informó de su estrecha coordinación con el FMI respecto a los compromisos de Argentina en el marco de su programa”.
Además dejó otra definición tajante al sostener que “las políticas argentinas, cuando se basan en la disciplina fiscal, son sólidas” y subrayó que la “banda cambiaria sigue siendo adecuada para su propósito”.
Asimismo, señaló que se revisó el amplio consenso político en Argentina para la segunda mitad del mandato del Presidente Milei”.
“Me alentó su enfoque en lograr una libertad económica fiscalmente sólida para el pueblo argentino mediante la reducción de impuestos, el aumento de la inversión, la creación de empleo en el sector privado y la colaboración con aliados. A medida que Argentina se libera del lastre del Estado y deja de gastar para la inflación, grandes cosas son posibles”, recalcó el colaborador de Trump.
Bessent insistió en que “el éxito de la agenda de reformas de Argentina es de importancia sistémica, y una Argentina fuerte y estable que contribuya a consolidar un hemisferio occidental próspero redunda en el interés estratégico de Estados Unidos. Su éxito debería ser una prioridad bipartidista”.
Finalmente, señaló que “espera con interés la reunión entre el Presidente Trump y el Presidente Milei el 14 de octubre, y volver a ver al Ministro Caputo al margen de las Reuniones Anuales del FMI”.El ministro y su equipo llegarán este viernes a Buenos Aires, pero ya tienen boletos de regreso a Washington para el fin de semana porque desde el lunes participarán de la
Baja del dólar
Con la tendencia a la baja del mayorista y el oficial el precio de los bancos privados se mantuvo en $ 1.410/1.460. El “blue” quedó en $ 1.455/1.475.
Con la movida que sucedió en el mercado mayorista, el MEP cedió a $ 1.483 y el Contado con Liquidación a $ 1.507, con lo cual las brechas se redujeron a 2,6% y 4,1%, respectivamente.
Con este cuadro de situación, el Tesoro pudo frenar la hemorragia de dólares, que le había costado U$S 1.800 millones desde el miércoles pasado.
Por otro lado, cuando los operadores vislumbraron el acuerdo se produjo un llamativo salto en bonos y acciones. Los títulos públicos tuvieron subas de hasta 8% como en el caso del AL30, con lo cual se espera la confirmación de una caída en el Riesgo País que en el último calculo se mantenía en 1.071.
En acciones, los ADRs también vivieron una jornada muy favorable, arrastrados por los bancos y en especial por la decisión del Banco Macro de recomprar acciones. Sus papeles volaron 11,5%, liderando la tabla, junto a Superville (11,3%), BBVA (10,5%) y Banco Galicia (9,5%). También se destacó la performance de Central Puerto que subió 10,6%.
El buen clima se extendió a la plaza local donde el MERVAL avanzó 5,3%, también con fuerte impacto de los papeles bancarios.